Luis Velázquez
Las garantías constitucionales y los derechos humanos experimentan las peores agresiones en Veracruz.

1) La madriza policiaca a los indígenas de Soledad Atzompa que reclamaban servicios públicos y que reproduce la golpiza a los viejitos pensionados en el duartazgo.

2) El legendario y mítico pitorreo a las ongs, colectivos y solecitos iniciado en el sexenio anterior y multiplicado en el bienio. El Fiscal azul resultó peor que el Fiscal rojo.

3) Cuatro meses y 8 días después, ninguno de los 19 asesinatos de reporteros y fotógrafos ni tampoco de los tres diaristas desaparecidos ha sido revisitado. El simple anuncio de la Comisión Estatal de Atención y Protección a Periodistas a nadie convence. Y en la LXIV Legislatura encargada del área está ocupada en otras cosas terrenales. El grupo Podemos en el Parlamento Europeo ya pidió “congelar” las relaciones comerciales con México. Veracruz, aportando su cuota (i)rresponsable. Ninguna razón, más que, digamos, la incompetencia policiaca y la impunidad, para el asesinato de Ricardo Monlui Cabrera, el tiroteo a Armando Arrieta y el tiroteo a la reportera de Orizaba, Guadalupe Fuentes Barco, se hayan dado.

4) Todos los días, un secuestrado, un desaparecido, un crimen. Los solecitos, peor que en el duartazgo, por ejemplo, cuando el pitorreo a la mamá de Rubí, en Orizaba, desaparecida una noche en un antro.

5) En el duartazgo, la rectora de la Universidad Veracruzana y los llamados Copipes ocupaban la calle para la indignación crónica, ahora, las partes achicadas y reducidas al silencio. Si la doctora Sara Ladrón aseguraba que Javier Duarte “nos quitó el derecho a soñar”, la yunicidad les estrelló el derecho a protestar, pues la UV sigue esperando el pago de los más de 2,600 millones de deuda equivalente a los subsidios federal y estatal, y nadie creería que de “la noche a la mañana”, los Copipes resolvieron sus pendientes en el Instituto de Pensiones.

“TODOS COLUDOS O TODOS RABONES”

6) Cierto, Arturo Bermúdez, Flavino Ríos, Mauricio Audirac y Francisco Valencia (de ñapa, el líder campesino César del Ángel) están presos en el penal de Pacho Viejo. Pero, al mismo tiempo, resulta inexplicable que el otro grupito de duartistas privilegiados esté libre, sin que nadie lo toque, entre ellos, Érick Lagos, Jorge Carvallo, Adolfo Mota, Édgar Spinoso, Juan Manuel del Castillo, Vicente Benítez, Alberto Silva y María Georgina Domínguez. De paso, Moisés Mansur Cisneyros y Franky García. “Todos coludos o todos rabones” diría el paisa. En contraparte, la rara y extraña y sospecha impunidad para Ricardo García Guzmán, ex Contralor en el duartismo, y quien alardeaba de que era el consejero político del prófugo de la justicia. Y ni modo que sea un ángel de la pureza incorruptible.

7) Cuatro meses después de iniciado el bienio, la única obra política que puede connotarse es el ajuste de cuentas que algunos llaman la venganza. Claro, los duartistas “se pusieron de pecho” a la yunicidad con la insólita corrupción. Pero al mismo tiempo, cero obra pública, nula obra social. Y seguir inculpando al fugitivo, además de que a nadie ya convence, parece disco rayado. En el sentir popular se cacarea más el nepotismo en su dimensión estelar para heredar la alcaldía jarocha a un hijo. Y más, porque seis de cada diez habitantes de Veracruz fueron declarados en la miseria y la pobreza y la jodidez por el CONEVAL. El derecho humano a la calidad de vida que es todo: trabajo, salud, educación y seguridad.

LA VIDA… POR EL CARGO PÚBLICO SIGUIENTE

8) La justicia tiene su tiempo. Pero antes del dictamen sobre las 67 denuncias penales en la Fiscalía y de los 300 políticos que son investigados y de las 777 carpetas de investigación en proceso, los ex funcionarios del par de sexenios anteriores (Javier Duarte y Fidel Herrera) han sido juzgados y condenados en la pasarela política y mediática. Grave, en el tiempo del nuevo sistema penal. Un atentado a los derechos humanos, porque el daño moral está causado. En todo caso, que la justicia tome su tiempo con moderación y prudencia política, a tono con un Estado de Derecho. Claro, la yunicidad necesita la crucifixión mediática dado el momento electoral. Pero la dignidad de los otros es lesionada, golpeteada, agredida, sobajada. ¡Vaya escenario, por ejemplo, de los policías custodiando a Mauricio Audirac para declarar en el juzgado! ¡Mejor trataron los policías federales a Joaquín “El chapo” Guzmán! Pero ni hablar, la obsesión es así: el góber azul declarando sobre el estado de salud de Flavino Ríos…, en vez, digamos, de que lo haga el secretario de Salud y/o el director del hospital. Blanca Nieves en el país de las maravillas.
9) Parte del gabinete legal azul igual que el duartazgo. Los funcionarios públicos como unos trapecistas de la política. Julen Rementería del Puerto, Indira Rosales San Román y Joaquín “El chapo” Guzmán Avilés, utilizando la SIOP, la Sedarpa y la Sedesol para amarrar la candidatura al senado el año entrante. La vida, por el cargo electoral siguiente. Y los pobres, allá que se las arreglen como puedan. Pobres son y pobres seguirán exclamaba el ideólogo social de Javier Duarte, Marcelo Montiel Montiel, según la fama pública con una fortuna de dos mil millones de pesos, incluido su ranchito en Curitiba, la metrópoli sexual del continente.

CON INFORMACIÓN DE: EL PIÑERO DE LA CUENCA.