5/9/12

JAVIDU Protege a "Amigos" y "Quelites", de Fidel Herrera alias el "ZETA1".


“El que nunca ha tenido y llega a tener, loco se quiere volver”, reza un viejo proverbio, y parece ser lo que le está sucediendo a Rosa Elena Lara Austria, que oficialmente funge (¿o finge?) como Coordinadora de la Zona 1 del Colegio de Bachilleres del Estado de Veracruz (COBAEV) integrada por 8 planteles, y a cuyas oficinas no se ha presentado en lo que va del año. 


Pero lo más interesante es que la dama ya anda repartiendo entre sus amistades y allegados una “invitación” donde se lee que asumirá el cargo de directora general de esa institución en breve con la anuencia del “gobernador próspero”, Javier Duarte de Ochoa. 

Lo interesante del caso es que también la señora Lara Austria ya anda repartiendo nombramientos como directora del COBAEV entre amigos, amigas y cuates que viven en la entidad y en Tamaulipas, donde de hecho reside, pues aunque es originaria de El Higo, donde su padre Víctor Lara González fue alcalde, como buena norveracruzana se le hizo lejos la capital del Estado y prefirió los aires tampiqueños para desarrollar actividades. 

Quizá enterada de que le va a tocar premio sin haber jugado a la lotería, entre mayo y julio pasados, antes de que concluyera el anterior ciclo escolar, realizó diversos viajes entre Kentucky y Nueva York, Estados Unidos de Norteamérica, y antes de eso anduvo una buena temporada en Europa ¿haciendo qué? 

Ella asegura que es “cuestión de días” para que se dé a conocer su nombramiento por parte del señor Duarte de Ochoa luego de darle las gracias al actual titular de esa institución educativa, Antonio Ferrari Cazarín. 

Algunos que han conocido la situación, se preguntan qué méritos tiene para llegar a ser titular del COBAEV, en el caso de que se confirme plenamente lo que ella anda voceando por todos lados, y la respuesta surge de inmediato: 

Es protegida del exgobernador Fidel Herrera Beltrán, quien al parecer le sigue teniendo tanto aprecio que le dijo a su sucesor que no fuera malo y le eche una “manita”, porque “se lo merece” ¿Será?...