13/3/17

(ACTUALIZADO) FLAVINO RIOS, LA SEGUNDA LACRA DUARTISTA A LA CARCEL...


El periodista Carlos Loret de Mola informó que se han abierto dos carpetas de investigación en contra del ex gobernador de Veracruz, Flavino Ríos, quien fue detenido el fin de semana.

Marzo 14/2017.- Las dos carpetas tiene que ver con presuntos desvíos de recursos.

En una carpeta se le acusa de un desvío de 257 millones de pesos cuando era secretario de gobierno de Javier Duarte.

En la segunda, por 2 mil millones de pesos en la que está acusado junto con los demás integrantes de la Junta Directiva del Instituto de Pensiones, por presuntamente saquear las reservas de este instituto.

CON INFORMACIÓN DE: CAMBIO DIGITAL.

Flavino Ríos: la fuga de Duarte y los enredos del cómplice.

POR:MUSSIO CARDENAS ARELLANO.


Lleva dos ex gobernadores Yunes: a Dante Delgado lo refundió en la cárcel acusado de corrupción, y salió no por inocente sino por haber sido acusado a destiempo, y a Flavino Ríos lo recluye por encubrir y facilitar la fuga de Javier Duarte.
Aciago este domingo para Flavino Ríos Alvarado, que pasadas las 8 de la mañana siente la mano de la ley en su humanidad, detenido al salir de su hogar en Xalapa, acusado de ser el artífice de la huida de Javier Duarte, el 13 de octubre de 2016.
Corre la versión en tiempo real, como si a Reforma se lo hubiera filtrado Miguel Ángel Yunes Linares, el gober azul. O se lo filtró. Escueto, refiere el mensaje del diario en la red Twitter, que el ex gobernador interino había sido detenido bajo cargos de encubrimiento y facilitar la fuga del gordobés.
Un par de horas después, en entrevista con XEU, Ríos Alvarado confirma su detención y advierte que no tendría problema para probar su inocencia.
Erró. Por la tarde le fue determinada prisión preventiva de un año, vinculado a proceso por la huida de Javier Duarte.
Su historia se remonta al 13 de octubre de 2016, cuando Javier Duarte fue visto por última vez, usando un helicóptero del gobierno de Veracruz, facilitado por Flavino, aunque éste de inicio lo negó.
Cinco días después, el 18 de octubre, Flavino Ríos rechazaba el señalamiento, cualquier vínculo con la fuga de Javier Duarte. Tajante, le decía a la periodista Adela Micha, en Radiofórmula que no había prestado aeronave alguna, que consultaran las bitácoras de cada unidad, que si hubiera alguna responsabilidad “que se me castigue”.
Eran sus palabras:
“Incluso ayer que me enteré de la noticia di indicaciones a la Dirección de Transportes Aéreos, que depende de la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas, para que pusiera a disposición de la autoridad competente, en caso de que sea necesario o que lo solicite, todas las bitácoras de todos los transportes aéreos con los que cuenta el gobierno de Veracruz y que si hay alguna irregularidad, responsabilidad o algún acto ilegal o indebido, pues que se me castigue”.
—¿Usted le prestó un helicóptero para salir del estado?
—Falso completamente.
—¿No usó (Duarte) ningún helicóptero propiedad del gobierno del estado?
—No sé, te soy sincero, no sé, lo cierto es que yo no presté ningún helicóptero, si hizo uso de algún transporte aéreo del gobierno del estado se está investigando.
Ofrecía poner a disposición de la autoridad las bitácoras de los vuelos del jueves, viernes, sábado, domingo; “todo lo que solicite”.
Refería el ex gobernador interino que desde su toma de protesta no había mantenido ninguna comunicación con Javier Duarte. Sin embargo, los hechos lo desmintieron. Él mismo se desmintió.
Meses después,Flavino Ríos intentó matizar su error. Algo no cuajó en su maniobra. Las bitácoras de vuelo, las bitácoras originales, lo delataban.
Dijo el 7 de noviembre:
“Él (Javier Duarte) pidió un helicóptero que lo trasladó a Coatzacoalcos, lo pidió directamente al aeropuerto. Pedí a la gente del aeropuerto que le dieran las atenciones de un gobernador porque yo no sabía que existía una orden de aprehensión”.
En otra declaración apuntó:
“Yo no sabía en ese momento que existía una orden de aprehensión, tampoco tenía por qué saberlo, no es algo que me informe la PGR. Él habló al aeropuerto, pidió un helicóptero, se lo proporcionaron, y se trasladó a Coatzacoalcos”.
Una versión difundida por el periódico Diario de Xalapa detalla la forma en que presuntamente habría facilitado Flavino Ríos la fuga de Javier Duarte. Aquí el texto.
“De acuerdo a lo narrado, horas después de tomar el cargo como gobernador interino, el 13 de octubre de 2016, Flavino Ríos Alvarado se presentó en las instalaciones de la dirección de aeronáutica en el Aeropuerto de El Lencero entre las nueve y diez de la mañana para hablar con Ricardo Casanova Morales, analista de proyectos de aquel departamento.
“En la reunión, Flavino Ríos dio la orden a Casanova Morales de brindar todas las facilidades logísticas al exgobernador Javier Duarte de Ochoa debido a actividades propias de su cargo (¿cuál cargo si ya no era gobernador?).
“Al siguiente día —14 de octubre— a las 15 horas Ricardo Casanova recibió la llamada de un número desconocido al que le comunicaron a Duarte de Ochoa. El exmandatario preguntó en qué tiempo tendría listo un helicóptero, a lo que el encargado respondió entre 40 y 50 minutos.
“Fue cerca de las 16:30 horas cuando Casanova Morales recibió otra llamada de número desconocido —con lada de la Ciudad de México—, al otro lado de la línea Duarte de Ochoa le solicitaría que una aeronave fuera enviada al Agrocentro Siglo XXI, que se encuentra en la carretera Xalapa-Veracruz, en la localidad de Puente Nacional.
“Ricardo Casanova Morales se comunicó a la oficina de Miguel Pablo Portugal para que ordenar que recogieran a Javier Duarte en el lugar antes señalado; por lo que 20 minutos después despegó el helicóptero del aeropuerto El Lencero sin pasajeros, solamente con el piloto y el copiloto, Jesús Jaime Peregrina y Francisco Javier Herrera, respectivamente.
“La aeronave recogió al gobernador en el Agrocentro con una persona desconocida e informó que cambiarían de destino debido a que se trasladarían al centro de convenciones de Coatzacoalcos. Una vez que aterrizaron ambos pasajeros subieron a un vehículo con rumbo desconocido.
Desata su aprehensión una reacción airada del priismo de Veracruz, de sus pares, del séquito que en los tiempos de Javier Duarte se montaban en el saqueo, o callaban ante el atraco a las arcas.
Protesta el PRI, sus aliados en la oposición y un sector de la prensa que lo ve como víctima del gobernador Miguel Ángel Yunes linares, de su sed de venganza, de su fobia al duartismo y a Flavino Ríos por ser el que operó la fuga.
Del saqueo, del abuso de poder, del atropello a la ley no habló Pepe Yunes, el senador, en la mayor parte del sexenio duartista. Lo hizo al final, cuando sintió que se podría descarrilar. Hoy sí. Increpa y cuestiona, vía Twitter:
“Como todos en Veracruz, demando combatir la impunidad y corrupción, pero sin sesgos ni conveniencias políticas ni como estrategia mediática”.
Un segundo mensaje dice:
“El proceso de Flavino Ríos se debe llevar conforme a derecho y respetando las garantías individuales”.
Héctor Yunes, el otro senador, fue el último en enterarse que a su compañero priista lo tenían en prisión. También acudió a Twitter:
“Por el bien de Veracruz, esperamos que la detención de Flavino no sea una acción injuriosa disfrazada de justicia”.
Hay otro que no es priista pero también increpa a Yunes Linares por la aprehensión de Flavino Ríos. Es Andrés Manuel López Obrador, líder de Morena.
“Es un acuerdo (…) es propaganda, nada más —dice—. Tan es así que Yunes acaba de apoyar al que fue contralor de Duarte para que sea candidato a presidente municipal de Pánuco del PAN”.
Otros priistas, los de la cúpula, desdeñan a Flavino Ríos. Refieren que debe ser investigado, procesado y si tiene responsabilidad, que pague.
Enfrenta Yunes Linares el escarnio. Le imputan que es show, caja china, distractor ante la ola de violencia y muerte, los cárteles dirimiendo sus conflictos a punta de bala y sangre, el escándalo por la impunidad de los duartistas, acogidos en el PAN y en el gobierno yunista como héroes, olvidando que fueron cómplices en el saqueo a Veracruz.
Pocos, sin embargo, saben lo que entraña Flavino Ríos. Yunes azul sí. Conoce su operación política, su estructura de poder, sus filias y sus fobias, los amigos y rivales.
Gobierna Flavino Ríos a Veracruz desde los días del alemanismo, tripulando a Alejandro Montano Guzmán, el guarura del ex gobernador Miguel Alemán, el ex secretario de Seguridad Pública que lo llevó a encabezar el Consejo Estatal de Seguridad Pública y la Secretaría de Gobierno con todo lo que implica: el pulso de la violencia, la identidad de los capos, el negocio ilegal y sus ramificaciones, las complicidades, la capacidad de agresión de los grupos que conforman el crimen organizado.
Cae Flavino Ríos cuando se recrudece la violencia en Veracruz, los cárteles disputando el territorio, sembrando muerte, disparando los índices delictivos, irritando a la sociedad, motivando la embestida de los que avizoran que Yunes Linares ya fracasó.
Cae Flavino Ríos cuando la violencia se dispara. Así ocurrió con el falso general Arturo Bermúdez Zurita, ex secretario de Seguridad Pública, de imagen siniestra sobre quien pesa la acusación de operar con policías vinculados al crimen organizado, de lucrar con la muerte, el secuestro, el levantón, las fosas, la venta de protección.
¿Qué entraña su aprehensión? ¿Sólo haber facilitado la huida de Javier Duarte o la ola de violencia que golpea a Veracruz, operada por el duartismo?
Hoy, por lo pronto, duerme en prisión.
 Dos semanas más, quizá tres, y serán sacudidas de nuevo las estructuras fidelistas y duartistas. Viene una denuncia penal que implica a los ex gobernadores Fidel Herrera Beltrán y Javier Duarte de Ochoa, a funcionarios de sus gobiernos, de Invivienda del duartismo y del mismo yunismo, secretarios de Desarrollo Social y Medio Ambiente, empresarios inmobiliarios, constructores, tres notarios públicos, titulares de fideicomisos, dos ex síndicos municipales y hasta el célebre narcoempresario Francisco “Pancho” Colorado Cessa, preso en Estados Unidos, condenado a 20 años de cárcel por lavar dinero para el grupo delincuencial Los Zetas. 

Eso sí, muy cuate de Fidel. Se trata del caso Tony Macías, operador de Fidel Herrera, detentador del Parque Tecnológico Puerto México. Les serán imputados mínimo 10 delitos…

CON INFORMACIÓN DE: MUSSIO CARDENAS ARELLANO.